La tendencia de digitalización en todas las industrias se está acelerando a un ritmo vertiginoso. De acuerdo con predicciones de Statista, se estima que en los próximos 10 años habrá 50 mil millones de dispositivos conectados, generando y analizando una cantidad masiva de información, lo que da lugar al auge del Internet de las Cosas (IoT).

Sin embargo, surge un desafío considerable: cómo aprovechar de manera efectiva los datos generados para impulsar el desarrollo empresarial. Las cantidades colosales de información que se están produciendo resultan prácticamente imposibles de analizar con las computadoras actuales. Es aquí donde radica la importancia de la Computación Cuántica para el futuro de la industria 4.0.

Aunque el concepto de Computación Cuántica está ganando cada vez más relevancia, todavía se percibe como algo novedoso para muchos. En esencia, las computadoras cuánticas son máquinas extremadamente potentes, capaces de llevar a cabo cálculos y procesamientos de información masivos que, utilizando métodos tradicionales, llevarían años o incluso siglos.

Esta tecnología está destinada a revolucionar la forma en que viviremos en los próximos años, con aplicaciones que abarcan prácticamente todos los sectores. Entre las primeras industrias que se beneficiarán se encuentran la aeroespacial, química, salud, logística y finanzas.

Las aplicaciones son prometedoras. En el campo de la química, por ejemplo, la Computación Cuántica podría utilizarse para simular las propiedades y el comportamiento potencial de nuevas estructuras moleculares. Esto abriría la puerta a la exploración de soluciones de sustancias con un menor impacto ambiental, como refrigerantes que no contribuyan al calentamiento global o solventes innovadores para la captura de dióxido de carbono.

En el ámbito de la salud y el desarrollo farmacéutico, esta tecnología podría acelerar de manera significativa la investigación, desarrollo y producción de nuevos tratamientos médicos, lo que reduciría los plazos y costos involucrados. Si actualmente un nuevo tratamiento tarda entre 10 y 13 años en llegar al paciente, con la Computación Cuántica se podría recortar drásticamente la fase preclínica, lo que supondría ahorros significativos en costos de producción, llegando incluso a los 2,500 millones de dólares.

En la industria aeroespacial, se podría aprovechar el poder de la Computación Cuántica para anticipar y resolver problemas complejos antes de que ocurran, o para encontrar la mejor solución ante eventualidades que puedan afectar el rendimiento de las aeronaves. Por ejemplo, si una tormenta amenazara las operaciones de una aerolínea, esta tecnología podría determinar de manera eficiente las rutas alternativas para minimizar el impacto en los viajes programados.

Actualmente, existen algoritmos en computadoras convencionales que abordan algunos de los desafíos de la industria aeroespacial, pero no tienen la capacidad de considerar todas las variables involucradas en las operaciones de una aerolínea, o les tomaría años hacerlo. Con la Computación Cuántica, las simulaciones y cálculos se podrían llevar a cabo en un tiempo drásticamente menor, permitiendo así sortear emergencias de manera eficaz.

Además, esta tecnología podría ser fundamental para identificar los aeropuertos óptimos para preparar repuestos de aeronaves, o los puntos estratégicos para asignar recursos con el fin de evitar retrasos en los itinerarios de pasajeros, equipos de mantenimiento o tripulación.

En el ámbito logístico, la Computación Cuántica podría potenciar la eficiencia en los procesos de almacenamiento, procesamiento y entrega. Los almacenes y centros de distribución están integrando cada vez más sensores y maquinaria conectada, generando una enorme cantidad de datos. Las computadoras cuánticas podrían determinar de manera óptima la ubicación de sensores para recopilar la información más valiosa y acelerar el proceso de aprendizaje automático para tomar decisiones más acertadas. Asimismo, ayudarían a definir las rutas más eficientes para los trabajadores o robots dentro del almacén.

Aunque pueda parecer una tecnología sacada de una novela de ciencia ficción, la Computación Cuántica ya está al alcance de las empresas y en los últimos años se han logrado avances sorprendentes, convirtiendo este avance tecnológico en una realidad cada vez más cercana. Muchas compañías han invertido en su desarrollo y se han formado alianzas estratégicas, como la de Honeywell con Microsoft, para hacer que esta tecnología sea accesible para investigadores y científicos.

La Computación Cuántica no es una fantasía, es una tecnología tangible que transformará nuestro futuro y el de prácticamente todas las industrias. Representa una disrupción que abordará múltiples desafíos en el ecosistema empresarial actual.